Un tribunal de Texas ha fallado en contra de la administración de Joe Biden, impidiendo la venta de materiales destinados al muro fronterizo entre Estados Unidos y México, en respuesta a una demanda liderada por el fiscal Ken Paxton y respaldada por el expresidente Donald Trump.
Un juez texano emitió este 27 de diciembre un fallo que prohíbe la venta de materiales del muro fronterizo por parte del gobierno de Joe Biden. Esta decisión surge tras una demanda presentada por el fiscal general Ken Paxton, quien argumentó que dichas acciones violaban disposiciones legales. El expresidente Donald Trump celebró el fallo como una «victoria» y aprovechó para criticar a la administración actual, calificándola de «corrupta» y «antiamericana».
La audiencia también incluyó una orden para investigar la supuesta venta ilegal de materiales, tras reportes que indicaban que estos fueron subastados por precios simbólicos. Según Paxton, la administración Biden violó normas al intentar deshacerse de los materiales, pese a que el Congreso había autorizado estas acciones bajo la Ley de Autorización de Defensa Nacional, siempre que se destinaran a reparaciones y no a nuevas instalaciones.
En paralelo, el expresidente Trump reafirmó su compromiso de retomar la construcción del muro fronterizo como una de las prioridades de su próximo mandato, que comenzará el 20 de enero. Durante su administración previa, se completaron aproximadamente 500 millas (unos 800 kilómetros) del muro.
Por su parte, la administración Biden aseguró ante el tribunal que cumplirá con la orden judicial durante los próximos 30 días, lo que permitiría a Trump disponer de los materiales según sus intereses.
El fallo representa un revés para la política migratoria de Biden y un refuerzo simbólico para Trump, quien busca consolidar su agenda de seguridad fronteriza. Además, la investigación ordenada podría intensificar las tensiones políticas y arrojar más controversia sobre la gestión demócrata.
Este fallo no solo marca un punto de conflicto entre las administraciones de Biden y Trump, sino que también evidencia el impacto de las políticas fronterizas en la dinámica política y judicial de Estados Unidos.