Dos meses después de la tragedia ecológica ocurrida en el mar de Ventanilla tras el derrame de petróleo, las labores de limpieza continúan. RPP Noticias llegó hasta la playa Cavero, una de las más afectadas.
Aquí, los trabajos de limpieza en piedras y peñascos se continúan ejecutando. Así, un grupo de mujeres limpian piedras de mar y otras remojan trapos y escobillas para restregar las superficies de las piedras que están en las orillas.
Otro grupo, usando mamelucos, casos y arneses, se suben en andamios colocados cercas a los peñascos para continuar con la limpieza. Dos meses después del derrame, aún se encuentran deshechos de hidrocarburos acumulados.
Además, aún se encuentra una gran cantidad de basura arrojada por el mar y en lo largo de la orilla aparecen aves muertas.
Limpieza
La transnacional petrolera Repsol informó este último sábado que los trabajos de limpieza en el mar y litoral peruanos alcanzan un avance del 92 %, tras el derrame de petróleo de enero pasado en los terminales de la refinería de La Pampilla.
«A la fecha tenemos 16 playas, las cuales ya se encuentran limpias, y estamos pendientes de su reapertura para uso público, decisión que depende de la autoridad competente», informó el gerente senior de Seguridad, Calidad y Medio Ambiente, José Reyes, en una nota de prensa.
El derrame de petróleo ocurrió el 15 de enero, cuando el buque italiano Mare Doricum descargaba combustible a las tuberías submarinas de la refinería La Pampilla, que opera Repsol en el municipio de Ventanilla.
En un primer momento, la empresa reportó que se trataba de una fuga de 0,16 barriles (unos 25 litros) y que había sido causada por el «oleaje anómalo» producido por una erupción volcánica en Tonga.