Rusia no debe abandonar su programa de exploración pese a que la sonda Luna-25 se estrellase el domingo, señaló el jefe de la agencia espacial Yuri Borísov. “Interrumpirlo sería la peor decisión que podríamos tomar”, estimó el director general de Roscosmos. Moscú debería “dominar todas las tecnologías”, añadió.

Moscú, Rusia

Para él, la primera sonda que lanzó Rusia a la Luna desde 1976 se estrelló en el satélite terrestre “principalmente” porque Rusia “interrumpió su programa de exploración espacial durante cerca de 50 años”.

Accidente

“La experiencia incalculable acumulada por nuestros predecesores en los años sesenta y setenta se perdió casi por completo y el traspaso de conocimientos entre las generaciones no tuvo lugar”, se lamentó Yuri Borísov.

El accidente se produjo porque un motor de la sonda no se apagó según el programa y “funcionó durante 127 segundos en vez de 84”.

Se formó una comisión especial para investigar las causas exactas del accidente.

(AFP)

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