Estados Unidos y Reino Unido atacaron de nuevo el lunes a los rebeldes hutíes de Yemen para disuadirlos de seguir golpeando buques en el mar Rojo, a lo que los insurgentes respondieron prometiendo venganza.
Londres y Washington declararon en un comunicado conjunto que atacaron «ocho objetivos hutíes en Yemen, en respuesta a los continuos ataques de los hutíes contra el tráfico internacional y comercial, así como contra buques de guerra que transitan por el mar Rojo«.
Los ataques, hacia la medianoche del lunes (21H00 GMT), «se dirigieron específicamente contra un centro de almacenamiento subterráneo de los hutíes y contra emplazamientos relacionados con capacidades de vigilancia aérea y de misiles», añadió el comunicado conjunto.
Desde mediados de noviembre, los hutíes han atacado lo que consideran buques ligados a intereses israelíes en el mar Rojo, en solidaridad con los palestinos de Gaza.
Su campaña ha perturbado el tráfico marítimo y llevó a Estados Unidos y Reino Unido a realizar ataques retaliativos. Desde entonces, los hutíes han declarado que los intereses de estas dos potencias también son objetivos legítimos.
Los hutíes, movimiento respaldado por Irán y que apoya al Hamás palestino en su conflicto con Israel, habían reivindicado el lunes un ataque contra un buque militar estadounidense frente a las costas de Yemen, y dijeron estar dispuestos a seguir sus ataques.
«No quedarán impunes»
Los rebeldes reportaron 18 ataques de Estados Unidos y Reino Unido contra su territorio en las provincias de Saná, Hodeida, Taez y Al Baida, y prometieron en un mensaje en la red X que dichas operaciones «no quedarán impunes».
Las fuerzas de Estados Unidos y Reino Unido llevaron a cabo una primera ola de ataques contra el grupo rebelde a inicios de este mes.
«Estos ataques de precisión están destinados a interrumpir y degradar las capacidades que los hutíes utilizan para amenazar el comercio mundial y la vida de los marinos inocentes», precisó el comunicado conjunto.
«Lo que hemos hecho de nuevo es enviar el mensaje más claro posible de que seguiremos reduciendo su capacidad [de los rebeldes] de llevar a cabo estos ataques», dijo el ministro británico de Exteriores, David Cameron.
(RPP)