La jefa del Gabinete ministerial, Mirtha Vásquez, señaló que está evaluando el cambio de algunos ministros, pero rechazó que esto se pueda usar como condicionante para que ciertas bancadas en el Congreso le den el voto de confianza.
«Hay algunas bancadas que sí han hecho un pedido específico sobre sacar ministros antes de votar la confianza. El voto de confianza tiene que girar en torno a la política que el Gobierno presenta, hemos expuesto las acciones, qué avances tenemos y cuáles son nuestras metas, creo que ese es el núcleo central del voto de investidura. Hay pedidos de que se pueda evaluar ministros, yo les he manfiestado que ese proceso está en marcha, la evaluación está en marcha, pero no podemos asegurar que termine antes de que se produzca el voto de confianza», afirmó a Nada está dicho en RPP.
Precisó que este proceso de evaluación «no necesariamente» culminará antes del 4 de noviembre, fecha en que se retomará la sesión del pleno del Congreso para votar la confianza. «Son procesos que corren en tiempos diferentes», dijo.
«Nosotros tomamos muy en serio las preocupaciones, yo soy una especial interesada en que los funcionarios que estén ahora en el gobierno cumplan con requisitos de idoneidad y capacidad, lo estoy revisando, pero creo que esa no debe ser una condicionante, tenemos que pensar que este país tiene que salir adelante y para eso tiene que aprobarse la política», agregó.
Señaló que algunos de los cuestionamientos contra ciertos ministros «son válidos», pero «cuando hacen acusaciones tan graves como, por ejemplo, al ministro de Educación (Carlos Gallardo) que tiene vinculaciones con el terrorismo, les he pedido a las bancadas que me entreguen alguna prueba y ninguna me ha entregado ningún medio probatorio. Se toma en cuenta la preocupación, pero hay que verificar todas esas imputaciones».
El pacto social
La presidenta del Consejo de Ministros también se refirió al término «pacto social» que empleó durante su presentación ante el pleno del Parlamento, el cual fue cuestionado por sectores que lo vinculaban a una eventual asamblea constituyente.
Mirtha Vásquez precisó que se trata de un «pacto de gobernabilidad, donde los poderes del Estado nos centremos en lo que la sociedad está demandando; no podemos seguir en este tipo de confrontaciones, en este relacionamiento de unos años para acá donde lo que tenemos son pugnas, procesos en los que tratatmos de anularnos un poder al otro».
«Signifca trabajar conjuntamente con miras a la gobernabilidad, a la estabilidad del país. Si más adelante se dan procesos de movilización ciudadana pidiendo la nueva Constitución, etcétera, tendremos que escucharlos», apuntó.