Cada mañana, las puertas de muchos hogares en Lince se abre con esperanza. Los adultos mayores en situación de pobreza y pobreza extrema, algunos con dificultades para movilizarse, reciben con gratitud una ración de leche de soya calientita, del programa social Soyalin. Con una jarra en mano y una sonrisa en el rostro, esperan la llegada de la camioneta de la Municipalidad que, con dedicación, lleva este alimento a quienes más lo necesitan.
Gracias a “la vaca mecánica”, producimos más de 100 litros de leche de soya diariamente, endulzada o natural, según la preferencia de cada vecino. Este gesto sencillo gracias a nuestra alcaldesa Malca Schnaiderman, no solo alimenta el cuerpo sino también el alma de nuestra comunidad
Si conoces al alguien mayor de 60 años que pueda necesitar este apoyo o deseas formar parte de esta red solidaria, acércate a la Municipalidad e inscríbete en el programa Soyalin con una copia de tu dni.
Juntos podemos seguir transformar vidas, una ración a la vez.
¡Sigamos construyendo un Lince más humano y solidario!