Un Madrid imparable y un City irreconocible en el Bernabéu
Con una actuación estelar de Kylian Mbappé, el Real Madrid venció 3-1 al Manchester City, asegurando su pase a los octavos de final de la Champions League. El conjunto de Carlo Ancelotti mostró su mejor versión en un partido donde los de Pep Guardiola nunca encontraron su identidad.
Superioridad blanca desde el inicio
El Real Madrid apenas necesitó cuatro minutos para golpear primero. Raúl Asencio filtró un pase que aprovechó Mbappé, quien definió con maestría ante la salida desesperada de Ederson. La defensa del City, con un errático Rubén Dias, no pudo contener la ofensiva madridista.
El equipo inglés, carente de profundidad y con una posesión sin peligro, se vio sobrepasado por un Madrid sólido y preciso. Dani Ceballos manejó los tiempos, mientras que la movilidad de Jude Bellingham, la velocidad de Vinícius y la electricidad de Rodrygo desarmaron por completo al City. El joven defensor Khusanov, obligado a marcar a ‘Vini’, se vio constantemente superado, lo que quedó evidenciado en el segundo gol blanco a los 33 minutos.
En una jugada coral, Bellingham combinó con Vinícius, quien asistió a Rodrygo. Este, con gran visión, sirvió para Mbappé, que con un recorte y un potente zurdazo, desató la locura en el Santiago Bernabéu.
Un City sin reacción y la noche soñada de Mbappé
El Manchester City jamás mostró signos de vida ofensiva. Phil Foden tardó 66 minutos en probar un disparo, y el primer remate entre palos del equipo inglés llegó recién en el 76’, cuando Nico aprovechó un rebote tras un tiro libre al travesaño.
Mientras tanto, Mbappé seguía brillando. Tras rozar su tercer tanto en varias ocasiones, lo logró con una espectacular bicicleta y un zurdazo al palo largo. El Bernabéu, rendido ante su nuevo ídolo, coreó su nombre en una de las mejores actuaciones individuales de la temporada.
Un Madrid imponente y un City sin respuestas
La superioridad blanca fue absoluta, mientras que el Manchester City dejó una de sus imágenes más débiles en la era Guardiola. Con este resultado, el Real Madrid avanza con firmeza y se perfila como uno de los favoritos para conquistar su decimosexta Champions League. Ahora, su próximo rival en octavos podría ser el Atlético de Madrid o el Bayer Leverkusen.