La de este 2 de julio es la sexta noche de protestas en Francia después de la muerte del joven de 17 años Nahel, a manos de un policía en medio de un procedimiento aún por esclarecer.
La insurrección en las calles se ha vivido entre manifestaciones pacíficas y actos violentos en diferentes ciudades francesas. Por tercera noche consecutiva de las seis desde que iniciaron las protestas, el Gobierno anunció el despliegue de 45.000 oficiales para responder al levantamiento social en las calles de diferentes ciudades.
En medio de los disturbios, la prensa francesa ha anunciado que el presidente de la República, Emmanuel Macron, recibirá el lunes 3 de julio al presidente de la Asamblea Nacional, Yaël Braun-Pivet, y al del Senado, Gérard Larcher. E indica que el jefe de Estado también se reunirá el martes 4 de julio con los alcaldes de «más de 220 municipios víctimas de abusos».
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