La reciente decisión de la Junta Nacional de Justicia (JNJ) de reposicionar a Patricia Benavides como fiscal de la Nación ha generado polémica debido a la ausencia de la firma de la secretaria general Giovanna Díaz en el acta correspondiente. A pesar de esto, el abogado de Benavides, Jorge del Castillo, minimiza la situación, asegurando que no tiene trascendencia alguna.
Del Castillo argumentó que este tema ya está superado, ya que tanto un juzgado como la fiscalía han validado el documento de la JNJ, y en su opinión, la ausencia de la secretaria no afecta la legitimidad de la decisión. Además, recordó que la Ley Orgánica de la JNJ establece que las decisiones se toman con quórum y con la aprobación de dos tercios de los miembros, sin mencionar a la secretaria general en el proceso. En su visión, la ausencia de Francisco Távara en la sesión tampoco alteró la resolución, por lo que considera irrelevante la falta de la firma de Díaz.
Sin embargo, el penalista Luis Vargas Valdivia tiene una postura distinta. Para él, la presencia de la secretaria general es fundamental para dar fe del acto y el documento, cumpliendo una función esencial como fedataria. Según Vargas, la validez de la sesión y la resolución adoptada depende de que la secretaria certifique que el acuerdo realmente tuvo lugar, y su ausencia pondría en duda la legalidad del proceso.
Este desacuerdo pone sobre la mesa una cuestión crucial sobre los procedimientos legales y la validez de decisiones en órganos autónomos como la JNJ, que tendrá su último veredicto en la Corte Suprema.