A pocos días de iniciar la gestión del electo alcalde de Lima Rafael López Aliaga, fuentes de su propio Partido Renovación Popular, criticaron la inminente designación del cuestionado exgerente Humberto Antonio Guzmán Quispe, frente a la Empresa Municipal Administradora de Peajes de Lima (EMAPE).
En una entrevista realizada en una emisora local, López Aliaga comenta que le ha pedido a Guzmán Quispe, que vuelva a trabajar con él. Sin embargo, olvida mencionar que sobre este personaje pesan serias acusaciones por los presuntos delitos de colusión con defraudación patrimonial, cuyo agraviado es el Estado. También ha sido denunciado por abuso de autoridad, falsedad ideológica, y lavado de activos. Aunque algunas de ellas han sido archivadas, otras se encuentran en proceso de investigación.
Hay que recordar que el burgomaestre electo señaló que “va a declarar nulos los peajes de la corrupción”, en alusión a las vías construidas por OAS y Odebrecht. Este complicado proceso sería dirigido por Guzmán, quien tendría a su cargo la negociación con las empresas concesionarias. “Está pasando lo mismo que en la gestión de Pedro Castillo, no están filtrando bien a quienes van a ser funcionarios y hay varios con antecedentes” señalaron fuentes confiables.
El gobierno municipal de Renovación Popular aún no empieza y se empiezan a detectar personajes cuestionados. López Aliaga pretende atender a sectores vulnerables, y para ello ha ofrecido entregar el 10% de los ingresos de la Municipalidad a los comedores populares. Al respecto Alfonso Garcés, socio de Guzmán Napurí & Segura Abogados, ha indicado “Tiene buenas ideas respecto de las finalidades, pero no lo acompaña lo técnico”.