La Guardia Costera ha confirmado ayer jueves la muerte de los cinco pasajeros del Titan, debido a la pérdida de presión de la cámara del submarino. Entre los restos encontrados por uno de los robots que buscaba al Titan en el fondo del mar había una «estructura de aterrizaje» y la cubierta trasera del sumergible desaparecido.
Los equipos de rescate habían desplegado en el fondo marino dos vehículos robotizados en un nuevo intento para encontrarlo. Uno de ellos procede del barco canadiense «Horizon Artic», y el otro es el ROV Victor 6000, aportado por Francia a bordo del navío «El Atalante».
A bordo de la nave iban cinco personas, entre ellas un millonario, un experto en el Titanic y un empresario y su hijo. Tres de ellos pagaron 250.000 euros por realizar el viaje, que tenía como objetivo visitar los restos del Titanic cuando desapareció.
Foto: Reuters