Alianza Lima consiguió un empate histórico 2-2 frente a Sao Paulo en el estadio Morumbí, por la segunda fecha del Grupo D de la Copa Libertadores. A pesar de ir perdiendo por dos goles en el primer tiempo, el equipo blanquiazul reaccionó con garra en la segunda mitad, gracias a los tantos de Eryc Castillo y un espectacular gol de Kevin Quevedo, que selló la igualdad con una media chalaca que silenció a los hinchas locales.
El equipo peruano inició con dificultades, dominado por un Sao Paulo que parecía tener el partido controlado. En apenas cinco minutos, Ferreira marcó un doblete para los brasileños: el primero tras una jugada iniciada por Luciano, y el segundo con un cabezazo certero a pase de Marcos Antonio. Alianza Lima no bajó los brazos y tuvo algunas oportunidades antes del descanso, incluyendo un disparo al travesaño de Hernán Barcos y un remate de Quevedo que exigió al arquero Rafael.
El segundo tiempo trajo otra historia. La salida por lesión del defensor Robert Arboleda desestabilizó a los locales, mientras que los dirigidos por Néstor Gorosito encontraron nuevos aires. Castillo descontó con una gran definición y encendió la ilusión del empate. Diez minutos después, Kevin Quevedo ejecutó una media chalaca inolvidable que puso el 2-2 final y dejó helado al Morumbí.
En los últimos minutos, Sao Paulo intentó recuperar la ventaja, pero se encontró con un inspirado Ángelo Campos, que detuvo un remate a quemarropa de Lucas Ferreira y salvó un punto de oro. Con este resultado, Libertad lidera el grupo con 6 puntos, seguido de Sao Paulo con 4, Alianza Lima con 1, y Talleres sin unidades.
Este empate no solo fortalece el ánimo del conjunto íntimo tras eliminar a Boca Juniors en la fase previa, sino que demuestra que el equipo está preparado para competir en cualquier cancha. Alianza Lima mostró carácter, talento y determinación, valores que serán claves para soñar en esta Copa Libertadores.