Tropas israelíes, respaldadas por aviones de combate y drones, volvieron a realizar una incursión en suelo gazatí este 27 de octubre para atacar objetivos concretos de Hamás; una posible antesala de su anunciada ofensiva terrestre. Todo mientras los incesantes bombardeos cobran la vida de miles en el enclave: 7.326 civiles, entre ellos más de 3.000 niños, según la última actualización de las autoridades locales. La comida, el agua y el combustible se agotan, alerta la ONU. Hamás, por su parte, advierte que no liberará a más secuestrados hasta que se fije un alto al fuego.
(FRANCE24)