El Poder Judicial otorgó un plazo de cinco días a la Junta Nacional de Justicia (JNJ) para que restituya a Tomás Aladino Gálvez Villegas en su cargo de Fiscal Supremo Titular, luego de que el Tribunal Constitucional anulara el procedimiento disciplinario en su contra. La decisión, emitida el 30 de mayo, exige que se deje sin efecto la destitución y se habilite nuevamente su título como fiscal.
Según la resolución del 10° Juzgado Constitucional, se admitió el recurso de amparo presentado por Gálvez y se ordenó su cumplimiento inmediato. La JNJ fue notificada el mismo día de la emisión del fallo, lo que activa el plazo desde este lunes 2 hasta el viernes 6 de junio, para ejecutar su reposición oficial. El documento establece que se debe dejar sin efecto la inscripción de la sanción y restablecer su título dentro del Ministerio Público.
La medida se basa en una resolución del Tribunal Constitucional del 28 de abril, que declaró fundada la demanda de amparo de Gálvez, anulando el proceso disciplinario iniciado en febrero de 2020. Sin embargo, el fallo también permite que la JNJ pueda iniciar un nuevo procedimiento disciplinario, si lo considera pertinente.
Pese a la orden judicial, persisten obstáculos legales para que Gálvez vuelva a sus funciones. Actualmente, figura como afiliado y dirigente del partido político Peruanos Unidos: ¡Somos Libres!, lo cual contradice la Ley de Carrera Fiscal, que prohíbe que fiscales activos estén inscritos en partidos políticos. Esto podría impedir su retorno efectivo al cargo, pese a la restitución ordenada.
El caso de Tomás Gálvez reabre el debate sobre los límites de la autonomía fiscal, el rol de las instituciones de control disciplinario, y la necesidad de garantizar la imparcialidad política en el sistema de justicia. La decisión final de la JNJ será clave para determinar si se prioriza el fallo constitucional o las normas que rigen la función fiscal.