El Gobierno indicó a Keiko Fujimori que no resulta posible jurídicamente atender su pedido al Presidente Francisco Sagasti, para que solicite una auditoría de las Elecciones 2021 ante la Organización de Estados Americanos (OEA).
En un oficio enviado a la candidata de Fuerza Popular por el ministro de Justicia y Derechos Humanos, Eduardo Vega, se precisa que el Poder Ejecutivo y el Presidente de la República no pueden intervenir en el proceso electoral atendiendo un pedido realizado por una de las fuerzas políticas participantes.
“En virtud del principio de neutralidad que debe respetar toda institución del Estado y encontrándose el proceso de elecciones generales en curso, no resulta posible jurídicamente atender el pedido formulado”, se lee en el documento.
Denuncias de irregularidades deben ser resueltas por el JNE
Respecto de las irregularidades a las que Keiko Fujimori hizo referencia en la carta enviada al presidente Francisco Sagasti, el titular del Ministerio de Justicia y Derechos Humanos indicó que las mismas deben ser atendidas por el Jurado Nacional de Elecciones. Agregó que al Ejecutivo le corresponde cumplir y hacer cumplir lo que resuelva dicha autoridad electoral.
“Conforme al artículo 178 de la Constitución Política del Perú, las posibles irregularidades a las que hace referencia su carta, deben ser atendidas por el Jurado Nacional de Elecciones, que viene evaluando y resolviendo las impugnaciones y pedidos de nulidad formulados por las agrupaciones políticas”, indica el oficio.
Solicitud de auditoría
El pasado lunes 28 de junio, la lideresa de Fuerza Popular dejó en Palacio de Gobierno una solicitud para que el presidente Francisco Sagasti pida una auditoría de los comicios ante la OEA. Precisó que dicha auditoría debía realizarse con el objetivo de determinar “si los resultados procesados y contabilizados de la ONPE representan un fiel reflejo de la voluntad popular”.
Ahora, tras el rechazo de la solicitud, la candidata presidencial señaló que el presidente Francisco Sagasti “ha abdicado” de su responsabilidad de garantizar elecciones limpias en igualdad de condiciones. Agregó que en nombre de una “supuesta imparcialidad” prefirió dejar a todos los peruanos en incertidumbre electoral.