Como parte de la campaña multisectorial ‘Ponle freno al acoso’, liderada por la Autoridad de Transporte para Lima y Callao (ATU) para mitigar este delito en el Metropolitano, siete casos registrados ya llegaron a la fiscalía para que se procesen y, eventualmente, se sancionen.
Esta estrategia ha mostrado resultados significativos. En lo que va del año, se han reportado 75 casos de acoso en el mencionado sistema de transporte masivo, 38 de los cuales han sido registrados desde que se puso en marcha la fase piloto de la campaña, el 18 de abril pasado.
El plan de acción incluye el trabajo conjunto con la Policía Nacional del Perú (PNP) y el Ministerio de la Mujer y Poblaciones Vulnerables (MIMP), las brigadas antiacoso de la ATU, personal incógnito en buses, módulos de atención, filas para vulnerables, audios en estaciones y buses, delimitación gráfica de espacios, entre otras medidas.
En este contexto, Marybel Vidal, presidenta de la ATU, reafirmó el compromiso de la autoridad para promover espacios y ambientes seguros y libres de acoso en el Metropolitano. «Nuestra meta es garantizar la seguridad y bienestar de las niñas, niños y adolescentes», afirmó.
Las medidas de esta campaña, que ya se ejecutan en 20 estaciones, desde el terminal Matellini, en Chorrillos, hasta la estación Central, en el Cercado de Lima, han mejorado la percepción de seguridad en el Metropolitano, que se incrementó de 34% a 50%, según sondeos entre usuarios realizados por personal de la ATU. Además, la incidencia de acoso sexual disminuyó de 21% a 15%.
El acoso sexual está tipificado en el artículo 176 B del Código Penal como un delito en el que “una persona, bajo cualquier medio, vigila, persigue, asedia o busca un acercamiento o contacto sin consentimiento de la víctima con la finalidad de llevar actos de connotación sexual”. Se sanciona hasta con ocho años de cárcel.