El pleno del Congreso aprobó por unanimidad que las ollas comunes sean reconocidas como organizaciones de base de carácter temporal o permanente, a fin de garantizar su sostenibilidad, financiamiento y el trabajo productivo de sus beneficiarios promoviendo su emprendimiento, en situaciones de emergencia por desastres naturales, sanitaria o de graves circunstancias que afecten la vida de la nación.

Así lo explicó la congresista Norma Yarrow (Avanza País), una de las autoras del proyecto de ley, quien saludó que la representación nacional haya consensuado unánimemente a favor de esta iniciativa ciudadana “que da alimentación a miles de peruanos de escasos recursos económicos”.

“El dictamen también dispone que se encarga al Ministerio de Desarrollo e Inclusión Social, el registro de las ollas comunes, a través del Registro Nacional de Ollas Comunes. Asimismo, define a las ollas comunes como iniciativas ciudadanas que congregan a personas en situación de vulnerabilidad que no puedan acceder a alimentos o que no cuenten con la capacidad económica para adquirirlos”, detalló.

Yarrow Lumbreras indicó que además “se autoriza a los gobiernos locales, al MIDIS y a los demás ministerios de corresponder que, en el marco de sus funciones y competencias, puedan realizar modificaciones presupuestarias y destinar recursos para financiar total o parcialmente la adquisición y distribución de alimentos dirigidos a las ollas comunes”.

“Igualmente, se establece que la Contraloría realice el control concurrente de las ollas comunes en cada gobierno local cuando se disponga de su funcionamiento y, al término de la declaratoria de emergencia”, acotó.

Por último, la parlamentaria enfatizó que el texto aprobado “precisa que el tránsito de una olla común para convertirse en comedor popular es un proceso voluntario y sujeto al cumplimiento de las disposiciones vigentes”.

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“Se dispone que los gobiernos locales deben gestionar la logística alimentaria de las ollas comunes registradas, teniendo en cuenta la calidad de los alimentos, el valor proteico, el valor energético, la eficiencia en el gasto y el aprovisionamiento de productos saludables para contribuir con la mejora de la calidad de vida de la población afectada por la situación de emergencia. Encargándose al Ministerio de Salud aprobar o actualizar, los documentos técnicos para la orientación sobre aspectos nutricionales”, concluyó.