El internacionalista Francisco Belaunde alertó sobre las posibles repercusiones económicas del conflicto en Medio Oriente, destacando el impacto en el precio del petróleo y las posibles consecuencias para la economía peruana. A nivel global y nacional, la situación podría desencadenar un aumento en los precios y riesgos de inflación.
Belaunde explicó que uno de los efectos inmediatos del conflicto sería el incremento del precio del petróleo, lo que desencadenaría un aumento en el precio de la gasolina. Este aumento podría repercutir en otros bienes y servicios, lo que traería consigo una amenaza inflacionaria para países como Perú, que recientemente había logrado controlar la inflación. El internacionalista advirtió que, si la inflación repunta debido a estos incrementos, el Banco Central de Reserva podría verse obligado a subir las tasas de interés. Esto, a su vez, afectaría la actividad económica del país, frenando el crecimiento económico.
Además, Belaunde abordó las dinámicas en el Medio Oriente, resaltando la interdependencia económica entre Irán y Qatar, dos países que explotan conjuntamente uno de los mayores yacimientos de gas del mundo. Este vínculo económico, según el experto, podría reducir la probabilidad de un conflicto militar directo entre ambas naciones, ya que las consecuencias serían catastróficas para ambos países desde el punto de vista económico.
En resumen, el conflicto en Medio Oriente no solo pone en riesgo la estabilidad política en la región, sino que también podría afectar las economías globales, especialmente en países como Perú, donde los incrementos en los precios del petróleo y las políticas restrictivas para controlar la inflación podrían frenar el crecimiento económico.