Con más de 400 efectivos desplegados y una estrategia milimétricamente coordinada, el Comando Unificado de Pataz ejecutó con éxito el operativo “Lobo”, una ofensiva conjunta contra la minería ilegal y delitos conexos que socavan la seguridad en la sierra liberteña.
El lunes 12 de mayo, desde horas de la madrugada, 407 agentes entre miembros de las Fuerzas Armadas y la Policía Nacional del Perú ingresaron a la mina “Galindo”, ubicada en el anexo Pueblo Nuevo, en el corazón del distrito de Pataz, para desarticular una red vinculada a la extracción ilegal de minerales.
La operación fue encabezada por el General de Brigada Marco Marín Saldaña y el General PNP Carlos Llerena Portal, quienes reafirmaron el compromiso del Estado con la pacificación del norte andino. “Estamos condenados a triunfar”, declaró Marín, dejando en claro que cuentan con los medios y la determinación para recuperar el orden.
En el operativo participaron unidades de élite como la Primera Brigada de Fuerzas Especiales (BRIFE), los batallones BIM06 y BIM323, y divisiones especializadas de la PNP como la DINOES, GRECCO y la Dirección de Medio Ambiente.
Durante la incursión, se incautaron 87 emulsiones explosivas (dinamita), 53 mechas con fulminantes, 2 kilos de ANFO, así como armamento y municiones ilegales que habrían sido empleados para potenciar actividades ilícitas.
La intervención se ampara en el estado de emergencia vigente, prorrogado mediante el Decreto Supremo N.º 060-2025-PCM, que otorga a las Fuerzas Armadas la autoridad para mantener el orden interno con apoyo policial, incluyendo la inmovilización social obligatoria en Pataz, Parcoy y Tayabamba.
A pesar de la inaccesibilidad geográfica del lugar, los efectivos demostraron una vez más su valentía, disciplina y entrega, enfrentando condiciones extremas en defensa del país.
La exitosa ejecución del operativo “Lobo” evidencia que el Estado no cede terreno ante el crimen organizado. Reforzar estas acciones integradas es fundamental para recuperar la paz, proteger el medio ambiente y devolver la seguridad a miles de peruanos que viven en zonas golpeadas por la ilegalidad.